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La mistica de tus ojos rubiosRebalsan mis pestañas de luzhay algo en tus sinsaboresde tardes perdidasque me recuerda a los lamentos sin consolarde un dios perdidoentre las fauces del tiempo.Un arpegio fugaz, una gema nacienteencienden el incendio de tu alma,ni mil girasoles logran calmarlos gritos que surgen de tu vientre,eres gorrion en el viento,juegos de niños, entre la violenciade mi cantar.Y si quieres el cielo, alcanzar con el suspiro de tus lagrimas,yo sere la luciernaga que guie tus pasosen la fria noche del aquelarre.Oh! suave princesa, de rios y mares,eres el pincel, las nubes blancasque acobijan las frias melodias del sol.
Que la sangre Brote del sueloQue las miradas se fundan en silenciosos placeresQue el viento susurre poemas sabuesosdesangrados de alma, deseosos de efimeros cantos.Que tus labios me lleven lejos de aquiMas alla del sol, mas cerca del alba.Que la pizca de deseo se torne fantasma del pasadoQue el vanidoso cantar de las sirenassea la cancion de cuna de mi almaQue tus palabras sean eternasse escapen de tus labiosse escurran entre mis sabanas.Que las lunas guien mi andarentre las sombras de mis poemasQue el dia empieze a nacercuando tus voces penetren mi luzQue mi espalada se quiebrecual sabrosos sueños de inviernoQue tu carne sea mi heridasangrando entre la risa del verdugo.Que tu lluvia extinga el misterioque cubre tu cuerpo perdido entre el mary ahuyente los pecados sin condenarque quiza el tiempo sea la parca desnudaen mi lecho de muerte.
Dispara tres veces el revolverLas palabras inundan tu sien,contagian tu alma,con el funebre aullarde las lagrimas perdidasen un vaso de vodka vacio.Estaras besando sus mañanascuando el sol no cante las buenas noches,Susurraras verdes melodias,el dia que la luz se apague por ultima vez.Veras crecer un rio en su pecho,y veras nacer de sus palmasel milagro mas hermosodel dios que nadie ve.El frio calmará,tus deseos de vuelo infinito,y seras paloma olvidadapor un nido que jamas fue tu hogar.Niña de porcelana,quiebrate con mi mirada de gorrion,mil puertas te rodeany solo una puedes abrir,toma mi mano, y danzemos sin destino alguno,que el viento sea nuestro guiay que las gaviotas lleven nuestras pesadas almas,gritos en la noche.
De rodillas te ruego,frente a una cruz sin cristo,Dejame volver a serlo que quizas nunca fui.Esa mariposa en primaveras sin nombre,ese caracol violaceo, eterno como el viento.Abrazame, como si mi cuerpofuese el tierno cantarde un niño del cielo,como si mis manos sean las cadenascon las cuales amarrastetodo salvaje instinto de tu alma.Desnudame, y come mi piel,que el manjar de mi desnudezse pasee en tu boca de peces sangrantes,y hiereme, si es necesario,para asi tornarme surreales sombrasque acallan las vocesde los lobos en la noche.Recitas poemas sin versos,mientras hundes mi vozen un mar de suspiros demenciales,aquellos que vomitaron tus pechoscuando la noche se hizo tiempo efimero.Ya eres prisionera,de apocalipsis sin jinetesy ya eres la sirenaque danza por la partitura de mis brazos,no dejes de cantar, de engalanar mi sufrimientocon el calido dulzor de tu voz.Y No dejes de ser, el verdugo de mi esperanzaquien, con la fria caricia de sus besosacalle mis lamentospara tornarlos agonia.

Alli donde la luna se sienta a descansar,
mis ojos se tornaron colores inimaginables,
danzas prohibidas entre magnolias sin nombre.
Su suave suspirar sobre mi desnudo pecho,
me recordaba al canto del niño que nunca juega,
a la rayuela interminable de mi alma,
al delicioso vaiven, de sus senos de lana.
Cielo o tierra, que mas da?
la piedra jamas cae en el regazo del gigante,
acaso no eres, niña, la sombra misma
del demonio que renace por las noches?
tu delirio es mi infancia,
tu mañana, mi sinfonia inconclusa.
Dame tu verdad, que yo te dare mis labios,
aquellos que no conocen mas que el frio dulzor
de los rostros sin sonrisas.
Y si el alba nos encuentra en trance,
abrigando la piel, de plumas sin nombre,
seras mi juguete perdido, entre los rizos del diablo.
Y te cruxificaras deseando volver a ser mi llanto,
deseando ser espinas, antes que pecados.