Hombres de manos sangrantes en el barro
construyen castillos de arena en el mar,
Mujeres de polleras sin palabras
bendicen millones de sonrisas
nacidas en la nada,
Reyes de coronas calvas, de reinos sin colinas
Gritan sin ordenar en las visceras del pueblo
que harto esta de gemir.
Paladines del orgullo de papel,
sabios oradores de efimeras verdades,
no son mas que prostitutas sin cuerpo
ya para vender,
estaqueados sin tiempo para sentir,
mirando con oidos de camaleon
atonitos ante tanta realidad.
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No sé porqué los paladines-oradores de las efímeras verdades me hicieron pensar en ciertos elementos de la clase dirigente que viven su propia realidad encerrados en la tibieza de sus refugios de Puerto Madero, donde gracias a los uniformados de Prefectura, la inseguridad (realmente) es solo una sensación...
ResponderEliminarLe mando un abrazo Poeta que abarque desde mi querida Avellaneda hasta su preciada Valentín Alsina...
PD: Cuanto hacía que no escuchaba "Alma de diamante" por el flaco!!! Algún día voy a postear algo sobre como nos repartíamos para ir a los recitales con un amigo fana de Spinetta (Yo de García, obviamente...)